jueves, 15 de julio de 2010

Correspondencia enviada por nuestros apoderadores legales

Panamá, 14 de julio de 2010.

Estimado Sr. Aquilino Sieiro Pinzón:
De forma recíproca me presento y contesto misiva, enviada por Usted (vía correo electrónico).

Ante todo, agradezco su invitación a un almuerzo/reunión, con la finalidad de abordar asuntos inherentes a mi actuación como apoderado judicial de las mujeres 20/30 Panamá Sur.
Al respecto, y siempre con mi habitual respeto, enumero mi respuesta;

1.- Acepto la reunión, siempre que la misma sea con el representante legal de vuestra asociación civil o con persona apoderada simple o judicial de la antes dicha persona jurídica.
2.- Soy un hombre de idoneidad ética probada en este país, Europa, Latinoamérica y otros pueblos en los que he interactuado como activista de Derechos Humanos. Por tanto, es menester informarles que jamás he insultado, acusado, exagerado en mi petitium a los ciudadanos/as identificados como miembros/as del Club Activo 20/30 – Panamá.
3.- Mi actuación judicial en la solicitud de las Ciudadanas 20/30 Panamá Sur, es un patrocinio procesal gratuito, realizado con la intención de restablecer un derecho vulnerado y como temática de Derechos Humanos, acopiarla en su momento y difundirla en medios de la región, Estados Unidos y Europa(con el objetivo único de hacer docencia).
4.- La Historia, desde su desarrollo mismo, con su parte de lógica y su continuidad; nos aporta la prueba de la indispensabilidad del reconocimiento al derecho de participación de ciudanos/as, como miembros/as de entes creados por la legislación positiva y que son de naturaleza civil. Explico el Club Activo 20/30, es una persona jurídica que existe en el territorio de la República de Panamá; toda vez, que le ha sido otorgado su condición por parte del Gobierno del Estado.
La aludida condición como persona jurídica, permite que participen personas sin distingos de ningún tipo. Resulta antagónico, atrasado, discriminante y tonto, que en pleno siglo XXI, todavía existan personas que discriminan por razón de sexo.
Me pregunto…. qué pensarán mis amigos y amigas 20/30 de otras latitudes y también EL RESTO DE LA SOCIEDAD CIVIL PANAMEÑA (que desconoce de tal aberración). Estoy convencido que todos/as comparten el simple criterio de incluir a mujeres, hombres, discapacitados, cristianos, negros, musulmanes, blancos, judíos, etc.; en cualquiera asociación civil, constituida conforme a los presupuestos constitucionales patrios.

Lo más malo de la gente mala, es el silencio de la gente buena; por esta razón, jamás me haría cómplice de estas acciones bochornosas, protagonizadas por una asociación civil (en mi país natal), cuyo éxito ha sido el consecutivo respaldo de todas las personas altruistas, éstas que no toman en cuenta el sexo de sus miembros.
¡Acciones de discriminación como estas, debería darles vergüenza!
Sin más por el momento, queda de Usted,

Atentamente,

Dr. Gustavo Carlos Bailey Palacio.